Otitis en Conejos

¿Qué es la otitis? ¿Cómo puede manifestarse?
La otitis (Oryctolagus cuniculus) es un proceso inflamatorio e infeccioso que puede afectar al oído externo (canal auditivo), medio (membrana y bulla timpánica) o interno (oído interno) de nuestros conejos (ilustración 1).
¿Qué esperar en la consulta?
En la consulta, el veterinario:
- Hará preguntas para entender desde cuándo, cómo y de qué forma tu mascota presenta este problema.
- Examinará a tu conejo para determinar el tipo de otitis y su origen. Palpará con cuidado las orejas de tu mascota, las examinará con el otoscopio, revisará sus reflejos y comprobará si hay asimetrías faciales.
- Podrá recomendar pruebas específicas como:
a. Exámenes de sangre: hemograma y serología de Encephalitozoon cuniculi. Dado que su sintomatología es muy parecida a la de la otitis, es importante descartar su presencia. Además, es muy habitual que ambas enfermedades se manifiesten de forma conjunta.
b. Raspado cutáneo: en caso de sospecha de presencia de ácaros, se examinará al microscopio para detectarlos (ilustración 2).
c. Radiografía: para descartar afección evidente de las bullas timpánicas (aunque no siempre es valorable por radiografía) (ilustración 3) y otras patologías concurrentes, como infecciones de vías respiratorias o problemas dentales.
Ilustración 3. Comparación bullas timpánicas (círculo amarillo) en radiografía. Derecha (R),izquierda (L). Bullas aireadas, compatibles con la normalidad, imagen de la izquierda. Bullas alteradas condisminución del contenido en aire de su interior, imagen de la derecha.
d. Cultivo: para determinar la bacteria implicada y adecuar el tratamiento antibiótico a cada paciente. En la mayoría de los casos de otitis media, se necesitan antibióticos específicos con buena penetración para conseguir un buen resultado. Un tratamiento a ciegas puede alargar el proceso de curación y agravar el cuadro clínico.
e. Pruebas avanzadas, como TAC: para descartar un proceso de otitis media e interna, evaluar el grado de daño en las estructuras internas, establecer un pronóstico y determinar si es necesario un tratamiento quirúrgico. Hay lesiones que solo pueden valorarse con esta prueba (ilustración 4).
Ilustración 4. Comparación de oídos en imágenes de TAC. R (derecha), L (izquierda).
- Imagen 1: Engrosamiento de la pared de la bulla timpánica derecha (puntas de flecha amarillas).
- Imagen 2: La bulla timpánica izquierda está completamente llena de material y se muestra gravemente expandida, asociada a la presencia de pequeños focos de lisis ósea focal. Se aprecia destrucción ósea focal de la cóclea izquierda. El conducto auditivo externo izquierdo, asimismo, se muestra lleno de material isoatenuante.
- Imagen 3: Ambos conductos auditivos externos y ambas bullas timpánicas están llenos de aire. Las estructuras del oído interno permanecen intactas
4. Diseñará un plan de tratamiento personalizado según vuestras necesidades y las del paciente.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico suele basarse en una combinación de:
- Historia clínica y signos clínicos.
- Resultados de pruebas de laboratorio, específicamente el cultivo y el TAC.
- En la mayoría de los casos, se realiza un diagnóstico presuntivo y se inicia el tratamiento mientras se esperan los resultados.
Tratamiento
En función del origen de la otitis y los agentes implicados, el tratamiento variará:
- Otitis externa: tratamiento médico (tópico y/o oral) y, en ocasiones, quirúrgico (ablación del conducto auditivo externo). El veterinario pautará medicamentos y, si es necesario, os propondrá una cirugía para manejar el proceso.
- Ácaros como Psoroptes cuniculi: requerirá al menos un protocolo de desparasitación externa.
- Bacterias u hongos: tratamiento médico hasta la resolución de los síntomas. Los tratamientos con antibióticos suelen ser prolongados (más de 3 semanas) y, en algunos casos, crónicos.
- Lavado del oído bajo sedación: se puede realizar para extraer el material purulento del canal auditivo y aliviar el dolor que pueda provocar (ilustración 5).

- Otitis media e interna: en función de cada caso, se inicia un tratamiento médico. Siempre se recomendará la realización de un TAC para evaluar el grado de afección y planificar una posible cirugía, ya que suele ser necesaria la intervención quirúrgica o la miringotomía (toma de muestra a través del tímpano) (ilustración 6) para prevenir recidivas y obtener muestras adecuadas del agente causal.
Existen varios procedimientos quirúrgicos. Dependiendo del caso, el veterinario determinará cuál es el más adecuado para cada paciente.

¿Qué complicaciones puede haber tras la cirugía?
Las complicaciones dependerán, en parte, de los signos clínicos iniciales antes de la cirugía. En los casos en los que el animal presenta head tilt y/o parálisis facial, estos signos no suelen revertirse. A pesar de ello, la cirugía se recomienda para eliminar la infección y prevenir cuadros más graves, como meningitis o meningoencefalitis.
Cuando la bulla timpánica está afectada, pueden aparecer parálisis facial postquirúrgica o el inicio de head tilt o circling, en ocasiones reversibles.
Por otro lado, los puntos pueden soltarse y requerir una reintervención. Además, en función de la bacteria aislada y su antibiograma, podríamos enfrentarnos a bacterias multirresistentes, lo que limitaría el tratamiento y podría impedir la resolución definitiva de la infección.
Si hay una afectación del reflejo de parpadeo, es habitual que puedan desarrollarse úlceras corneales, que pueden controlarse con la aplicación de pomadas y colirios oftálmicos.
¿Cómo es la vida después del diagnóstico y tratamiento?
En los casos de otitis externa no complicada, suele haber una buena respuesta al tratamiento. El veterinario recomendará controles para evitar recidivas.
En los casos de otitis media e interna, la evolución dependerá del grado de afectación del oído y de la bacteria causante. Habrá animales que respondan correctamente al tratamiento y la cirugía, con una recuperación entre 2 y 4 semanas, mientras que otros pueden requerir tratamientos crónicos.
En los animales con ladeo de cabeza o parálisis facial, pueden surgir dificultades para moverse y alimentarse, pero también pueden llevar una vida completamente normal.
Prevención
Las visitas semestrales al veterinario permiten realizar un diagnóstico precoz de la otitis, lo que facilita la aplicación de un tratamiento adecuado y previene complicaciones derivadas de un diagnóstico tardío. Debemos tener en cuenta que, en muchos casos, nuestro conejo no presentará síntomas visibles de otitis.
Ante cualquier consulta, no dudes en ponerte en contacto con tu veterinario.
Preguntas frecuentes
Mi conejo se rasca, ¿tiene otitis?
En los casos en los que se rascan las orejas o sacuden la cabeza repetidamente, es probable que haya molestias en el/los oído(s). Si observas estos síntomas, se recomienda la visita al veterinario.
¿Puede empezar en un oído y pasar al otro?
Sí. Debido a la comunicación de las estructuras internas, la bacteria puede migrar de un oído a otro.
¿Cómo ha contraído esa bacteria?
Los animales pueden estar en contacto con estas bacterias en su entorno sin que les causen problemas hasta que surja una oportunidad para que se multipliquen, como en el caso de una otitis. También puede ocurrir que, tras tratamientos previos con antibióticos, algunas bacterias resistentes sobrevivan y proliferen. No siempre podemos identificar el origen exacto, pero lo importante es que, una vez identificada la bacteria, se puede comenzar con un tratamiento específico.
¿Se curará completamente?
Dependiendo del caso y del grado de afectación del oído, algunos animales se recuperan completamente, otros necesitan tratamiento y revisiones durante un tiempo, y otros requieren tratamiento crónico.
Contacta con nuestro equipo de veterinarios para animales exóticos en Barcelona si necesitas más información, estaremos encantados de atenderte.